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La Gran Castración de 2019: Por qué tu Tesla conduce peor que antes en Europa

· 5 min de lectura
FSD Spain
Equipo Editorial

En mayo de 2019, miles de propietarios de Tesla en Europa se despertaron con una sorpresa desagradable: sus coches habían empeorado de la noche a la mañana. Una actualización de software obligatoria había recortado severamente las capacidades del Autopilot. ¿La razón? Una regulación europea diseñada para sistemas de dirección asistida de los años 90.

El día que los Tesla europeos perdieron sus capacidades

Hasta esa fecha fatídica, los Model S y Model X europeos disfrutaban de una paridad funcional relativa con sus homólogos estadounidenses. El Autopilot funcionaba de forma fluida en autopistas, realizaba cambios de carril con naturalidad y el Smart Summon permitía convocar el vehículo a distancia.

Todo cambió con la actualización 2019.16.1, que implementó las restricciones impuestas por la Regulación 79 de la UNECE (Comisión Económica de las Naciones Unidas para Europa).

¿Qué es la UNECE R79 y por qué afecta a tu Tesla?

La Regulación 79 fue diseñada originalmente para sistemas de dirección asistida convencionales, no para inteligencia artificial capaz de conducir un vehículo. Sin embargo, en ausencia de una normativa específica para sistemas de conducción autónoma, Europa decidió aplicar esta regulación a los ADAS (Sistemas Avanzados de Asistencia al Conductor).

Las restricciones clave

1. Límites de aceleración lateral

La normativa estableció límites físicos arbitrarios sobre cuánta fuerza puede ejercer el sistema sobre el volante. Estos límites están calculados para curvas de radio amplio típicas de autopistas, lo que efectivamente ilegalizó el funcionamiento del sistema en curvas cerradas o rotondas urbanas, donde la aceleración lateral requerida supera los parámetros de la R79.

En la práctica, esto significa que en muchas rotondas españolas el Autopilot simplemente se desactiva o pide al conductor que tome el control.

2. El temporizador de 5 segundos

Para realizar un cambio de carril asistido en autopista (bajo el paquete Enhanced Autopilot), el conductor debe:

  1. Activar el intermitente
  2. El sistema tiene exactamente 5 segundos para completar la maniobra
  3. Si el tráfico impide realizar el cambio en ese intervalo, el sistema aborta y regresa al carril original

Esta restricción genera situaciones absurdas: intentas cambiar de carril, hay un coche en el punto ciego, el sistema espera, se acaba el tiempo, vuelve al carril original... y tienes que empezar de nuevo. Una experiencia frustrante que genera inseguridad tanto en el conductor como en el tráfico circundante.

3. Smart Summon: de futurista a inútil

Quizás la restricción más visible fue la del Smart Summon, la función que permite convocar el vehículo desde el parking:

CaracterísticaEE.UU.Europa (post-2019)
Distancia máxima~60 metros6 metros
Línea de visiónNo requeridaObligatoria
Navegación en parkingCompletaMuy limitada

Una función que en Estados Unidos permite al coche navegar un aparcamiento complejo quedó reducida en Europa a un truco de fiesta prácticamente inútil: 6 metros con línea de visión directa apenas da para que el coche salga de una plaza cuando estás justo al lado.

El impacto en la comunidad

El evento, conocido coloquialmente como "el gran nerfeo" (término de videojuegos para cuando se debilita un personaje o arma), tuvo consecuencias profundas:

Pérdida de confianza

Los propietarios europeos vieron cómo sus vehículos perdían capacidades por las que habían pagado miles de euros. Esto estableció un precedente de inseguridad jurídica sobre las compras de software en Tesla.

Desigualdad global

Mientras los conductores estadounidenses comenzaban a disfrutar de versiones cada vez más avanzadas del Autopilot, los europeos quedaron atrapados en lo que algunos llaman el "gueto de funciones": pagando el mismo precio por un producto significativamente inferior.

Importante recordar

Muchas de las limitaciones que experimentas en tu Tesla europeo no son culpa de la tecnología de Tesla, sino del marco legal impuesto por la UNECE R79. Entender esto es crucial para no culpar al fabricante de restricciones que no controla.

¿Hay esperanza?

La industria y los reguladores reconocieron eventualmente que la R79 era inadecuada para la inteligencia artificial moderna. Esto dio lugar al desarrollo del Reglamento DCAS (UN Regulation 171), diseñado específicamente para sistemas de asistencia avanzados.

A diferencia de la R79, el DCAS permite:

  • Maniobras iniciadas por el sistema
  • Conducción más fluida
  • Mayor autonomía operativa (siempre bajo supervisión del conductor)

Sin embargo, la implementación del DCAS y la posible llegada del FSD completo a Europa sigue siendo un proceso lento y burocrático, que analizaremos en futuras entradas.

Conclusión

El "nerfeo" de 2019 fue un punto de inflexión para la comunidad Tesla europea. Demostró que, por muy avanzada que sea la tecnología, la regulación tiene la última palabra. Y en Europa, esa palabra fue "no".

Para los propietarios actuales, la lección es clara: las funciones de tu Tesla están limitadas por la ley, no por la técnica. Y aunque hay señales de cambio en el horizonte (las pruebas del FSD en Madrid son un ejemplo), la paciencia sigue siendo la virtud más necesaria para el entusiasta de la conducción autónoma en el Viejo Continente.


¿Recuerdas cómo era tu Tesla antes de mayo de 2019? ¿Notaste el cambio? Comparte tu experiencia en los comentarios.